Hoy llegaba la inspiración a través de la entrevista de Fernando Alonso en AUTOSPORT. Hacía días que no leía algo sobre el Nano que me emocionase de verdad. Algo que despertara esa corriente eléctrica que me recorre la espalda y esos escalofríos que siento mientras sonrío. Estaba necesitando esta entrevista para empezar a escribir. Sin saberlo, la estaba esperando.
Me identifico con esa forma de analizar las situaciones, de colocarlas en el lugar que les corresponde para dejarlas ahí y seguir mirando hacia delante. La mente de Fernando es práctica, clara, limpia, directa, es hasta fría.
Siempre he pensado que llegó a Ferrari sin tener ni idea de lo que había allí para él. Iba en busca del mejor coche, del que le hiciera ganar títulos, quizás hasta batir récords. El coche no existía, pero Fernando se ha encontrado con algo que está siempre tocándole el corazón. Es por eso que al Nano se le ve feliz, cambiado, radiante, a gustito. Aún no ha ganado, pero va a hacerlo. Ahora sus declaraciones son oportunas, apropiadas, con buenas palabras hacia otros pilotos, hacia personas que forman o han formado parte de la F1. Y cuando de esas declaraciones no hay para quien hizo daño, se mantiene cauto pero claro. “Yeah, definitely there are some things that you would change in your career, but it’s the way it is. The good thing is that what I said was what I thought, and at that moment it was right. Sometimes it was [seen as] political, but it was not political for me. It was political for the one who didn’t like the truth. So that’s OK.”
Hace unos días le preguntaba a alguien que significa mucho en mi vida si estaría conmigo, si me apoyaría a pesar de lo que hiciera o dijera. La respuesta fue ‘sí’. Y así es como estoy yo con Fernando Alonso, así es como yo le apoyo: incondicionalmente. Espero que nunca deje de decir lo que piensa, por muy bonito que sea todo en Ferrari, hasta cuando por fin gane, espero de él que siga diciendo lo que piensa, aunque se equivoque, aunque no sea apropiado, ni lo más adecuado. Da igual. Seguiré estando ahí. Porque también lo están conmigo.
Silverstone, 2009. Lewis Hamilton adelantaba a Fernando Alonso. Ambos luchaban por la decimosexta posición. El público se levantaba y aplaudía. Era sólo la decimosexta, pero en aquellos momentos, era del Nano, y el inglés se la quitó. Había que recuperarla. Y lo hacía de forma contundente, limpia, certera, fría. Aquél R29 que todos queremos olvidar, pasaba por encima del McLaren como un rodillo. Y con Fernando dentro. Le reconocería en la pista aunque todos los cascos, todos los coches y todos los monos fuesen blancos. Le señalaría con el dedo y diría: “Ése es el Nano”. Sin miedo a equivocarme.
Marian
Gracias, Tati
Ha significado mucho para mí escribir esto
Aunque del Nano, ya casi creía que lo había escrito todo
¡Besos!
Foto: octetort.com
Tati me propuso escribir un texto sobre Fernando Alonso y esto es lo que me salió. Me encanta la imagen que ella ha elegido para acompañarlo. Dos mil nueve fue una temporada dura, pero también muy especial, porque entonces, como ahora, seguíamos estando ahí, sin abandonar.
Leo muchas veces que algunos dudan de la permanencia de los alonsistas en la F1 cuando Fernando ya no esté. Cuando no esté, no sé qué pasará, pero mientras esté, una cosa es segura: yo estaré ahí. Siempre. Buscando a 'mi' piloto en la pista. Esperando verle ganar.
Es muy bonito leer 'Un poquito de Fernando Alonso' en Octeto... AQUÍ
Me identifico con esa forma de analizar las situaciones, de colocarlas en el lugar que les corresponde para dejarlas ahí y seguir mirando hacia delante. La mente de Fernando es práctica, clara, limpia, directa, es hasta fría.
Siempre he pensado que llegó a Ferrari sin tener ni idea de lo que había allí para él. Iba en busca del mejor coche, del que le hiciera ganar títulos, quizás hasta batir récords. El coche no existía, pero Fernando se ha encontrado con algo que está siempre tocándole el corazón. Es por eso que al Nano se le ve feliz, cambiado, radiante, a gustito. Aún no ha ganado, pero va a hacerlo. Ahora sus declaraciones son oportunas, apropiadas, con buenas palabras hacia otros pilotos, hacia personas que forman o han formado parte de la F1. Y cuando de esas declaraciones no hay para quien hizo daño, se mantiene cauto pero claro. “Yeah, definitely there are some things that you would change in your career, but it’s the way it is. The good thing is that what I said was what I thought, and at that moment it was right. Sometimes it was [seen as] political, but it was not political for me. It was political for the one who didn’t like the truth. So that’s OK.”
Hace unos días le preguntaba a alguien que significa mucho en mi vida si estaría conmigo, si me apoyaría a pesar de lo que hiciera o dijera. La respuesta fue ‘sí’. Y así es como estoy yo con Fernando Alonso, así es como yo le apoyo: incondicionalmente. Espero que nunca deje de decir lo que piensa, por muy bonito que sea todo en Ferrari, hasta cuando por fin gane, espero de él que siga diciendo lo que piensa, aunque se equivoque, aunque no sea apropiado, ni lo más adecuado. Da igual. Seguiré estando ahí. Porque también lo están conmigo.
Silverstone, 2009. Lewis Hamilton adelantaba a Fernando Alonso. Ambos luchaban por la decimosexta posición. El público se levantaba y aplaudía. Era sólo la decimosexta, pero en aquellos momentos, era del Nano, y el inglés se la quitó. Había que recuperarla. Y lo hacía de forma contundente, limpia, certera, fría. Aquél R29 que todos queremos olvidar, pasaba por encima del McLaren como un rodillo. Y con Fernando dentro. Le reconocería en la pista aunque todos los cascos, todos los coches y todos los monos fuesen blancos. Le señalaría con el dedo y diría: “Ése es el Nano”. Sin miedo a equivocarme.
Marian
Gracias, Tati
Ha significado mucho para mí escribir esto
Aunque del Nano, ya casi creía que lo había escrito todo
¡Besos!
Foto: octetort.com
Tati me propuso escribir un texto sobre Fernando Alonso y esto es lo que me salió. Me encanta la imagen que ella ha elegido para acompañarlo. Dos mil nueve fue una temporada dura, pero también muy especial, porque entonces, como ahora, seguíamos estando ahí, sin abandonar.
Leo muchas veces que algunos dudan de la permanencia de los alonsistas en la F1 cuando Fernando ya no esté. Cuando no esté, no sé qué pasará, pero mientras esté, una cosa es segura: yo estaré ahí. Siempre. Buscando a 'mi' piloto en la pista. Esperando verle ganar.
Es muy bonito leer 'Un poquito de Fernando Alonso' en Octeto... AQUÍ
Lindo!! me encantan tus palabras y estoy de acuerdo contigo.. tu sabes que a mi no me caía mucho fernando, pero conquistó mi corazón, su forma de ser, todo,. que nunca cambie, tienes razón.. saludos!
ResponderEliminarEl Nano es él, lo que ves, no necesita barullos para promocionarse le basta con hacer bien su profesión, no dora la píldora anadie, no le importa que le tachen de políticamente incorrecto ya que es, para él, más importante aproximarse a la realidad, parece adivino cuando habla de las posibilidades de su coche, es genial como persona, es uno de los pocos que han sabido llevar la F1 a una categoría de mito, él viene de un lugar en el que no había campeones, poca tradición,pero no importa ya que es el campeón que nos merecíamos cuando disfrutábamos de Villeneuve, Senna, Hill, Senna, Prost, Lauda, ... por poner algunos, su abuelo (su mayor fan) falleció sin verle campeón del mundo, nosotros lo hemos visto dos veces y esperamos más, Fernando gana los corazones nobles porque él lo es, un abrazo!
ResponderEliminarHe puesto a Senna dos veces y es que era muy buenojeje, un abrazo!
ResponderEliminarEste comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminarHola Marian!!!
ResponderEliminarObrigada por ter escrito este lindo texto! E eu me encanto com a forma com que vocês também torcem por ele. Por aqui, no Brasil, eu estou tão acostumada com uma torcida tão negativa e depreciativa contra Alonso, que fico feliz e super encantada quando leio estas coisas tão bonitas que vocês escrevem sobre ele. As palavras de Silvo foram perfeitas...
Uma das coisas que me fazem não gostar de Vettel, é que ele me passe ser um personagem, falso e forçado a ser simpático, sorridente e espontâneo. Gosto do Alonso por ele é humano, erra, fala besteira, pede desculpas... mas é humano, como todos nós. E não um sujeito de vive sorrindo o dia todo como um bobão. Ninguém é perfeito, ninguém é 100% feliz o tempo todo.
É por isso, que assim como vocês, eu sou tããããão alonista!! hehe
Superrrrr bjusss pra vcs!
Tati
Hola Marian!
ResponderEliminarLindas palavras, Marian! O seu texto me emocionou muito, e não tive como não conter as lágrimas! (Ainda mais com essa foto linda!rsrs) Mas são lágrimas de felicidade por causa desse sentimento que ocupa um espaço enorme em meu coração: o orgulho em ser alonsista!
Esse sentimento funciona como um combustível que ajuda a controlar as pulsações do meu coração, que já sofreu muito com umas temporadas terríveis, mas também colecionou momentos mágicos e gloriosos que faço questão de mantê-los vivos em minha memória!
Mas todo esse sentimento forte é devido a essa pessoa talentosa, sincera, e ser humano extraordinário que é o Fernando Alonso. Torcer por ele é um privilégio, uma honra para mim! Até brinco com meus amigos, dizendo que posso ser brasileira, mas na Fórmula Um o meu coração bate com as cores da Espanha! rsrsrsrs
Um grande beijo para você, minha querida!
Julie
¿Corriente eléctrica? jajajajaja ¡que bonito!
ResponderEliminarLa mente de Fernando es fría, muy fría, gélida, maquiavélica... sólo existe su futuro personal, y el del resto es secundario. Quién sabe si un futuro Kubica le hará perder esa felicidad... ¿o se alegrará porque en Ferrari hay dos pilotos buenos, aunque uno le moje la oreja?
saludos ;)